En los últimos meses estoy viviendo situaciones relacionadas con las cimentaciones, las cuales aunque previsibles en este entorno de crisis, no dejan de ser importantes, ya que en un futuro no lejano, con una probabilidad no aceptable, acabarán en siniestros, los cuales, directa o indirectamente cargarán sobre las espaldas de los profesionales responsables del diseño o la dirección de los proyectos.

Estoy hablando de trabajos encargados a empresas de solvencia técnica mínima que están compitiendo en el mercado con empresas solventes, éstas organizaciones normalmente están en la fase final de su viabilidad como empresa, por lo que mandan en ellas, criterios de supervivencia frente a cualquier tipo de política. También se da el caso de empresas de nueva creación, normalmente originadas desde las empresas antes descritas y en las cuales, fácilmente, también priman aspectos cortoplacistas sobre una política de continuidad y solvencia a medio-largo plazo, única política posible en el entorno de las cimentaciones especiales.

El resultado de esta situación no es otro que la proliferación de trabajos de cimentación especial con un nivel de calidad inaceptable.

Si la realidad, arriba descrita, es problemática sobre cualquier unidad de obra, sobre las cimentaciones pasa a ser crítica, ya que
la posibilidad de detección a posteriori de una mala ejecución es baja, mientras que el coste de reparación de cualquier problemática detectada una vez construido el edificio es muy alto. En mi opinión, en una estructura, el diseñador tiene mucho menos control sobre la ejecución de la cimentación que sobre otras unidades, si a esto le sumamos el hecho de que, en fase de diseño ha asumido un nivel de incertidumbre mucho mayor que en otros elementos, por ejemplo un forjado, tenemos un cóctel peligroso donde la empresa de cimentaciones tiene mucho a decir.
A modo de ejemplo, evidentemente en el momento que diseñas un forjado tienes un nivel de incertidumbre sobre los imputs mucho menor que cuando diseñas un muro pantalla, además, en el forjado, podrás controlar que se arma correctamente y la calidad de los materiales, lo cual podrás hacerlo presencialmente, si quieres, y si no, te lo hará un técnico con unas instrucciones de control bastante claras.
En cambio en una pantalla ,sobre lo básico, que en mi opinión no es el hierro ni el hormigón (estoy por ver una pantalla rota por falta de hierro), poco control puedo tener yo como diseñador, se habrán hecho bien las juntas??, hormigonarán bien??? El tubo tremie lo retiran bien??? Los lodos los hacen y gestionan bien???? El terreno es el que he considerado????.
Resultado, mi responsabilidad como diseñador está en manos de la empresa de cimentaciones y como soy responsable, porque tengo responsabilidad, creo que estoy en una posición que me ha de permitir condicionar la empresa que debe realizar la cimentación.
Ya lo se, lo anterior suena horrible, pero si lo enfocamos de la siguiente forma ya no suena tan mal:
Como la unidad de cimentación especial implica un nivel de riesgo superior a otras unidades, no siendo factible acotar este riesgo a valores aceptables únicamente con controles externos habituales, siendo necesario tanto una voluntad como pericia concreta por parte de los industriales especializados, y como el que acaba sufriendo las consecuencias patrimoniales es en gran medida el proyectista y director de obra (a parte del usuario final), considero lícito que si no hay un filtro institucional para estos industriales como pueda ser las clasificaciones como contratista del estado, el proyectista y/o director de obra imponga criterios de selección sobre el industrial que realice dichos trabajos.
Hasta ahora, seguro que no he descubierto nada a los técnicos que se mueven en el entorno de la geotecnia y las cimentaciones, como profesionales de este sector, sois conscientes de esta dinámica, y de hecho, algo parecido vivimos los consultores en nuestro entorno de negocio.

 La razón de esta entrada no es otra que hacer una propuesta que creo tendría como resultado, acotar la problemática planteada, esta propuesta está basada en, dada la importancia de las cimentaciones en la construcción de cualquier edificación, establecer un filtro de las empresas que pueden realizar estos trabajos, al uso de las clasificaciones existentes para ser contratista para la Administración.

Las preguntas inmediatas a esta propuesta son tres sobre las cuales daré mi personal opinión, aunque creo que deben ser objeto de reflexión entre las partes implicadas:
·         Que criterios deben cumplir estas empresas?.  Personalmente establecería los siguientes criterios, los cuales argumentaré:

o        Existencia de la figura de un Director Técnico, como figura importante y apoderada dentro de la empresa, con titulación media o superior relacionada con la construcción, así como experiencia y formación específica en cimentaciones. Esta figura deberá ser el interlocutor con el diseñador y responsable de la cimentación,  y su función, debería ser, tanto el garantizar que la empresa que representa es coherente con unos principios técnico-profesionales adecuados, lo cual se reflejará en una mejor ejecución, además de tener una visión crítica y fundamentada  del diseño, lo cual debe permitir acotar la posibilidad que un defecto o anomalía de diseño (los consultores también nos equivocamos) acabe en un futuro siniestro.

o        Solvencia económica y operativa de la empresa, con un nivel adecuado de recursos propios, tanto económicos como materiales. Estos aspectos, aunque no garantizan la continuidad de la empresa a futuro, sí son un buen indicador.

o        Disponer de un seguro de Responsabilidad Civil adecuado. En caso de siniestro relacionado con la cimentación la capacidad de disponer de un seguro es básica, en caso contrario hay gran probabilidad de que únicamente los seguros de los técnicos acaben haciéndose cargo del coste de reparación.

o        Garantía de calidad en el trabajo mediante certificados tipo ISO 9001. La sola existencia de estos certificados indica la voluntad de las empresas en mejorar y dar un nivel de calidad adecuado a sus clientes, así mismo, implica una sistemática de trabajo que permite limitar las posibilidades de mala ejecución.

o        Experiencia en el mercado local de la obra a realizar. Sin ánimo nacionalista, conocer tanto los terrenos como la idiosincrasia de las zonas o anteriores experiencias, es un valor fundamental a la hora de plantear y ejecutar una cimentación adecuada. Evidentemente, es más probable que una empresa que trabaja en Catalunya (por que es donde mayormente trabajamos) desde hace 10 años sea más conocedora de las problemáticas típicas en Corbera de Llobregat (por poner una población), que una empresa de origen portugués (por poner una sitio lejano) que viene esporádicamente.
·          Esta clasificación irá contra la idea de un mercado competitivo?. La respuesta, en mi opinión, es no. El argumento básico de esta respuesta no es otro que mi conocimiento del entorno de la cimentación en Catalunya me permite resaltar que numerosas empresas como:
·         Sistemas de Cimentaciones
·         Rodio
·         2PE
·         Kronsa
·         Losan
·         Paubisa
·         ETG Cimentaciones
·         Geocisa
·         Grupo Terratest
·         IFC
·         Kellerterra
y alguna otra que se me habrá olvidado, cumplen sobradamente los requisitos arriba descritos, por lo que se puede afirmar que disponemos, en el mercado catalán, de un conjunto de empresas que por numero, tipología, origen y tamaño permiten suponer que se opera en un mercado competitivo, donde las reglas de la competencia rigen sobre las condiciones de negociación.
·         Quien aplica el criterio?. La respuesta a esta pregunta es difícil, en trabajos para la administración, la respuesta ha sido establecer una serie de clasificaciones como contratistas del estado para las empresas ejecutoras especializadas en cimentación, concretamente el grupo K subgrupos 01 y 02.

      Esto, que parece tan lógico como pertinente, no ha estado exento de malversaciones, ya que, como el criterio básico para dar dichas clasificaciones era el currículum de las empresas, aparte de la solvencia de éstas, constructoras de tamaño medio y grande tienen dichas clasificaciones, aunque, evidentemente, están muy lejos de ser contratistas especializados en cimentaciones a los efectos de lo aquí planteado. Independientemente de lo dicho, bastantes de las empresas mencionadas en la lista anterior tienen dichas clasificaciones.

Como respuesta, se pueden hacer muchas propuestas de clasificaciones u homologaciones, a modo de ejemplo muestro el típico apartado sobre clasificaciones de contratista para una obra de la Generalitat.

En base a lo expuesto anteriormente considero que el proyectista está lícitamente apoderado para condicionar la elección del industrial especialista de cimentaciones en aquellas obras en que el riesgo asociado a la cimentación pueda calificarse como especial, y que a falta de algún tipo de clasificación para los contratistas especializados en cimentaciones especiales, se utilicen criterios como los arriba expuestos.
Entiendo que esta dinámica no ha de verse como un mecanismo discriminatorio sobre ciertas empresas de cimentaciones, sino como una selección argumentada de los contratistas adecuados para realizar una unidad de gran implicación como es la cimentación, tal y como la propia administración realiza para las obras públicas. Respecto a los criterios, eso ya es otro cantar, arriba he hecho varias propuestas que pueden aplicarse desde ya, pero seguro que se pueden hacer otras muchas.

 En lo referente a facilitar que empresas pequeñas y/o jóvenes realicen obras, creo que eso es tan necesario como útil, lo que digo es que si yo soy el Director de obra y esa empresa no cumple los criterios que yo digo, quiero conocerla y que me convenza a mi que el nivel de riesgo (mi riesgo, el cual al final también es el riesgo del usuario final) que cojo con ella es admisible. La situación a evitar es que alguien irresponsable (porque no tiene responsabilidad real) gestione mi responsabilidad y el riesgo del usuario final.

No puedo cuanto menos acabar este texto sin hacer un comentario respecto a la importancia de un adecuado Estudio Geotécnico, pero como diría aquel, hoy no toca. Sin más me despido, agradeciendo de antemano el tiempo que habéis dedicado a la lectura de este texto.