La licuefacción implica la anulación de las tensiones efectivas, es decir las tensiones en los contactos entre partículas del suelo, debido a que la presión del agua aumenta sin aumentar las tensiones totales.

La presión de agua aumenta por un cierre repentino de la estructura del suelo, es decir, una bajada rápida de la porosidad, de forma que el agua intersticial contenida en los poros, en la medida que no puede migrar, entra en presión.

Un mecanismo típico que genera dichos cierres repentinos de la estructura son las vibraciones asociadas a los terremotos, las cuales, como en la siguiente foto, llegan a licuefactar los materiales sobre los que se cimentan las estructuras, haciendo que estos materiales pierdan totalmente su capacidad de generar mecanismos resistentes produciéndose el correspondiente hundimiento de las estructuras soportadas, pasando cosas como las de la foto.

Pero vayamos al objeto de este post, que no es otro que mostrar un experimento casero para ver la licuefacción en toda su plenitud, tal y como es mostrado en el siguiente video.

           Creo que es muy ilustrativo, los chavales, con sus saltos, generan unas vibraciones sobre una arena-limosa, estas vibraciones  licuefactan dicho material y entonces éste se transforma en un líquido viscoso incapaz de desarrollar mecanismos suficientemente resistentes y se hunden.
A modo de video más serio, aunque no por ello menos interesante , os pongo un video que en su día publicó Enrique Montalar en su excelente blog GEODIENDO. Lo considero como uno de los videos más ilustrativos que he visto sobre licuefacción provocada por un terremoto, más concretamente el último terremoto ocurrido en Japón.
Aviso a los amantes de ver grandes edificios bailando o incluso cayendo, el video no es nada espectacular, pero para los que vivimos y disfrutamos de esta disciplina que es la geotecnia, es fantástico.
Licuefacción de suelos en Makuhari, Japón
Gracias por el tiempo que me habéis dedicado.
juanjo